Ejército israelí lleva a cabo una incursión “preparatoria” terrestre en el norte de Gaza

El ejército israelí ha llevado a cabo durante la noche una incursión terrestre “relativamente grande” sobre la franja de Gaza. Según ha informado la radio militar, fuerzas terrestres (tanques e infantería) han entrado en el norte del enclave palestino para atacar “posiciones de Hamás”. La radio ha descrito la operación como la mayor de las que ha efectuado hasta ahora en la actual crisis. El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, aseguró el martes que Israel “está preparando una invasión terrestre de Gaza” y que será su Gobierno quien decida el momento exacto y los detalles. 

Atajaba así la información de The Wall Street Journal de que EE UU había presionado a Israel para retrasarla. También el presidente estadounidense, Joe Biden, negó la información. “Es una decisión israelí”, dijo. El miércoles las tropas israelíes lanzaron sobre la Franja el ataque a “gran escala” más letal desde el 7 de octubre, con 755 muertos, según el Ministerio de Sanidad gazatí. Además, Israel insistió en pedir la dimisión del secretario general de la ONU, António Guterres, al que acusa de justificar los ataques de Hamás.

La incursión de Israel en el norte de Gaza esta mañana es lo que los militares llaman una "operación de configuración".

Todo indica que esta incursión nocturna fue el preludio de una incursión mucho mayor y ampliamente anticipada que el gobierno israelí ha estado prometiendo, con el ambicioso objetivo de destruir la capacidad militar de Hamás "de una vez por todas".

La incursión de anoche tenía varios objetivos: reunir información de inteligencia sobre la ubicación de las posiciones avanzadas de Hamás en el borde del norte de Gaza; destruir sus puestos de tiro antitanques; y explorar rutas en.

Pero aquí también hubo un elemento de mensaje público.

Después de las críticas generalizadas a las fallas de inteligencia y seguridad que permitieron a Hamás llevar a cabo su incursión asesina en el sur de Israel el 7 de octubre, el gobierno israelí está bajo presión para demostrar que puede y va a tratar decisivamente con Hamás.

Desde hace semanas, cientos de tropas israelíes listas para la batalla han estado esperando la orden de entrar en Gaza.

Pero hay varios factores que frenan la orden de entrada. Aún están en curso delicadas negociaciones para liberar a más de 200 rehenes.

Estados Unidos advierte a Israel del probable alto costo en bajas para ambos lados.

Y Washington está presionando para que dé tiempo a que el ejército estadounidense coloque defensas aéreas alrededor de sus bases en el Medio Oriente, en previsión de ataques con drones por parte de militantes respaldados por Irán una vez que comience una incursión israelí a gran escala en Gaza.